Estamos siempre igual: vemos solo lo que tenemos delante de la nariz y nos olvidamos de girar ni un solo grado la mirada. De este modo perdemos la objetividad, se nos olvida analizar lo que realmente pasa a nuestro alrededor y engañar al pueblo pasa a ser un juego de niños.

Empecemos por entender unas cosas básicas para que no nos engañen:

1 Las iniciativas que toma un gobierno no se notan inmediatamente, sus efectos se hacen visibles en las siguientes legislaturas.

2 El gobierno en vigencia NUNCA podrá hacer un trabajo efectivo sin una oposición efectiva, que mejore las propuestas en marcha con críticas acertadas y clausulas certeras en las propuestas del senado.

Quien nos metió en esta situación no fue ni Zapatero ni el gobierno socialista, sino el modelo económico y la especulación que promocionó el partido popular durante sus legislaturas, llegando al culmen con la alianza Aznar-Blair-Bush, que apostó por una guerra, que pretendía ser "relámpago" con la ayuda económica de las grandes empresas a la cabeza de los mercados.

No, la guerra no fue relámpago, no duro 8 meses sino 8 años y aún queda mucho por hacer tras haber matado a miles de personas, lo que retrasó la recuperación de las inversiones de estos mercados, que ahora envuelven Europa en una guerra fría económica con el fin de recuperar las ganancias que en un principio se prometían.

Nota: Por si a alguien se le olvidó, quien realmente levantó la economía española no fue Jose María Aznar, sino el señor Rodrigo Rato, tachado con razón de genio empresarial, quien limpió las cuentas de varias empresas estatales para su privatización. Este hombre se negó tajantemente a colaborar en esta guerra y fue "invitado" a dejar las filas del partido popular. Seguramente de haberle escuchado antes, otro gallo nos cantaría.

No nos engañemos, los socialistas se encontraron con un sistema a punto de quebrar y no reaccionaron a tiempo, lo que supuso una enorme pérdida de empleos, de fondos para el estado y en medio de una situación de la que sigue siendo muy dificil de salir en su primera legislatura.

La segunda legislatura se siguió hundiendo en medio de la ya mencionada guerra fría económica de los mercados contra Europa, que acaparó la atención del mundo y obligó a los gobiernos y a los noticiarios a ser monotemáticos con el tema de las bolsas que antes nos daban del todo igual y de los que ahora nos informamos y aprendemos tanto (o deberíamos)

Zapatero ha derrochado fuerzas con sus políticas sociales, quizá equivocando el prisma y acomodando a personas que podían hacer mas de lo que hicieron para cojer las riendas de sus economías y crear nuevos puestos de trabajo. ¿Qué hacía mientras la oposición?

Por otro lado, nos ha dejado un sistema bancario muy fuerte, aunque tardaremos años en entender y agradecer, al menos a mi sí me queda algo claro: Sea quien sea el siguiente gobierno, apenas lo modificará y se veneficiará, como todos los españoles, de sus efectos en los próximos años.

Con todo este tostón que casi nadie habrá acabado de leer, no pretendo dar lecciones a nadie, solo me gustaría que enfriasemos la cabeza para poder pensar con claridad y que no nos engañen con tanta facilidad. Sin duda el planteamiento tiene errores y está abierto a debate, pero, por favor, informémonos antes de formar una idea y no culpemos solo al que tenemos delante, que no todo lo ha hecho mal.

Queda decir que no solo la clase política tiene la solución: Nosotros, cada individuo, tenemos la obligación de tomar la rienda de nuestras vidas y no delegar todo, limitandonos a atacar cuando las cosas no salen como queremos.

Indignémonos tambien porque nosotros mismos no tenemos las respuestas y no solo dejemos en manos de otros buscarlas.

Ánimo, no os limiteis a leer los post sin opinar, dejad de ser lectores pasivos sin palabra o nunca llegaremos a nada.